El Gobierno Nacional radicó la ponencia para el primer debate del Presupuesto General de la Nación (PGN) para el año 2025, con un monto total de $523 billones, un aumento del 3,9 % en comparación con 2024. Este presupuesto será sometido a votación en el Congreso el 24 de septiembre, con plazo hasta el 25 para presentar proposiciones de modificación.
De los $523 billones, $12 billones dependen de la aprobación de la ley de financiamiento que actualmente está en discusión en el Congreso. El desglose del presupuesto muestra que $327,9 billones se destinarán a gastos de funcionamiento, $112 billones al servicio de la deuda y $82,5 billones a inversión. Esta última cifra representa una reducción del 17,4 % en la inversión pública en comparación con los $99,9 billones asignados en 2024, lo que ha generado críticas desde diversos sectores, como el Consejo Gremial Nacional.

El Consejo Gremial, liderado por Bruce Mac Master, ha señalado que el presupuesto propuesto refleja un incremento del 6,2 % en los gastos de funcionamiento y un aumento del 19,1 % en el servicio de la deuda, mientras que la inversión pública sufre una significativa reducción, lo que podría afectar el desarrollo de proyectos clave para el país.
A pesar de las críticas y las más de 250 proposiciones para aumentar el gasto en inversión, el presupuesto continúa su trámite en el Congreso. Existen tres posibles escenarios para su aprobación: que el Congreso lo apruebe en las fechas estipuladas, que se rechace y se modifique, o que, en un caso improbable, rija el presupuesto del año anterior si no se aprueba a tiempo.