Thomas Matthew Crooks, el joven de 20 años que intentó asesinar al expresidente Donald Trump durante un mitin en Pensilvania, ha sido descrito por excompañeros de clase como alguien que sufrió bullying en la escuela secundaria y que no encajaba bien con otros estudiantes. Crooks, quien vivía en Bethel Park, un suburbio de Pittsburgh, a unos 56 kilómetros al sur del mitin de Trump, estaba registrado para votar como republicano y había hecho una pequeña contribución a un grupo afín a los demócratas en el pasado.
Crooks se graduó de la escuela secundaria Bethel Park en 2022. Excompañeros como Jason Kohler, de 21 años, recuerdan a Crooks como una persona solitaria que no mostraba ninguna expresión facial mientras caminaba por los pasillos de la escuela. Sarah D’Angelo, otra exalumna, lo describió como un chico tranquilo sin ninguna actitud política o violenta evidente. Sin embargo, una tercera compañera de clase dijo que Crooks no era necesariamente tímido o tranquilo cuando estaba entre su grupo de amigos.
El arma utilizada en el tiroteo fue un rifle AR-15, rastreado hasta el padre de Crooks, lo que ayudó a las autoridades a determinar la identidad del atacante. El padre de Crooks, Matthew Crooks, expresó su sorpresa y preocupación tras el incidente, indicando que esperaría a hablar con las autoridades antes de hacer comentarios sobre su hijo.
Los registros muestran que Crooks donó 15 dólares a Progressive Turnout Project, un comité de acción política alineado con los demócratas, en enero de 2021, cuando tenía 17 años. Más tarde, se registró para votar como republicano y solo emitió su voto una vez, en las elecciones generales de mitad de período de 2022.

Crooks abrió fuego contra Trump desde el tejado de un edificio cercano, fuera del perímetro de seguridad del mitin, antes de ser abatido por agentes del Servicio Secreto. Un espectador del mitin murió y otros dos resultaron gravemente heridos. Testigos describieron una escena caótica, con gente intentando administrar primeros auxilios a los heridos.
La policía encontró material explosivo en la residencia de Crooks y en su auto. Un portavoz de Discord, una plataforma de redes sociales, dijo que una cuenta vinculada a Crooks no mostró pruebas de planificación del incidente ni discusiones sobre sus opiniones políticas.
Crooks trabajaba en Bethel Park Skilled Nursing and Rehab, un asilo de ancianos cerca de su casa. La comunidad de Bethel Park, descrita como políticamente diversa, ha quedado conmocionada por el ataque, con residentes como Dan Grzybek y Andrew Bianco expresando su sorpresa y describiendo la zona como segura y unida.
El lunes se reveló que Crooks había comprado 50 cartuchos de munición en una armería local el mismo día del ataque, lo que ha sido un punto adicional en la investigación en curso por parte de las autoridades.