En respuesta a la reciente decisión del Consejo Nacional Electoral (CNE) de abrir una investigación formal contra la campaña del presidente Gustavo Petro por presunta violación de topes electorales, las centrales obreras del país, lideradas por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), han convocado a movilizaciones masivas para el próximo 23 de octubre. Según Fabio Arias, presidente de la CUT, estas marchas buscan «defender la democracia» y mostrar su respaldo al jefe de Estado.
La investigación del CNE señala que la campaña de Petro en 2022 habría superado los topes establecidos en más de $5.355 millones entre la primera y segunda vuelta presidencial. Para las centrales obreras, esta acción constituye un «golpe de Estado disfrazado», motivo por el cual llamaron a la población a salir a las calles en protesta.
El presidente Petro, quien ha arremetido contra el CNE y calificado la decisión como un intento de golpe, instó a las organizaciones populares a mantenerse en «asamblea permanente» y anunció que se prepara para movilizaciones a nivel nacional e internacional. Además, aseguró que la medida busca debilitar su gobierno y deslegitimar el voto popular que lo llevó al poder.
Aunque Petro sostiene que la decisión del CNE es un ataque contra su fuero presidencial, expertos en derecho electoral, como Rodrigo Uprimny, han desmentido las teorías del supuesto golpe de Estado, aclarando que el CNE tiene competencia para imponer sanciones administrativas, como multas o la devolución de recursos, pero no para destituir al presidente.
