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martes, febrero 11, 2025
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Iván Márquez propone una constituyente y llama a una nueva ola de movilizaciones en Colombia

En un movimiento audaz, Iván Márquez, líder de la Segunda Marquetalia, ha delineado sus ambiciosas metas en el recién iniciado ciclo de diálogos de paz con el Gobierno Petro. Durante la primera reunión en Caracas el 25 de junio, Márquez expuso la intención de su grupo de revisar profundamente el modelo político, social y económico del país, sugiriendo una constituyente como una de las vías para lograr estos cambios.

Márquez subrayó que la Segunda Marquetalia está comprometida con contribuir a la paz en Colombia, pero insistió en que los cambios deben ser profundos y no meramente cosméticos. «Representamos un contingente alineado con los propósitos del cambio, siempre y cuando este no sea cosmético y no se reduzca simplemente a una renovación del régimen de dominación y explotación que impera en Colombia», declaró.

En un mensaje que seguramente resonará en diversos sectores de la sociedad, Márquez también respaldó el estallido social de 2021 y sugirió que el país debería llenarse de «primeras líneas», en referencia a los movimientos de protesta juvenil que se destacaron durante las manifestaciones. Según él, estas movilizaciones son necesarias para continuar presionando por un cambio real y significativo.

Además, Márquez propuso una alianza con el ELN para impulsar un proceso de paz desde los territorios y comunidades. Aunque no se dieron muchos detalles sobre esta propuesta, es claro que busca fortalecer los esfuerzos de paz en colaboración con otros grupos armados.

El Gobierno, representado por el Alto Comisionado de Paz, Otty Patiño, y el jefe de la delegación, Armando Novoa, ha confirmado que estos diálogos no serán eternos y que no habrá un cese al fuego bilateral. No obstante, se habla de un desescalamiento del conflicto, con la Segunda Marquetalia comprometiéndose a renunciar a acciones ofensivas contra las fuerzas militares y la policía, así como a evitar operaciones armadas que afecten a las comunidades.

La agenda de negociación incluye cinco puntos clave: desescalamiento del conflicto, construcción de territorios de paz, reconocimiento de las víctimas como sujetos sociales transformadores, condiciones para la convivencia pacífica e implementación de acuerdos.

Márquez, quien retornó a la clandestinidad en 2018 tras argumentar incumplimientos del Acuerdo de Paz, ahora busca a través de estos diálogos no solo poner fin al conflicto armado sino también catalizar una transformación profunda del país, alineándose con la visión de cambio del gobierno de Gustavo Petro.

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