El gobierno de Gustavo Petro anunció que Colombia restablecerá el requisito de visa para los ciudadanos británicos que deseen ingresar al país. La medida responde a la decisión del Reino Unido de exigir nuevamente visa a los colombianos a partir del 24 de diciembre, debido al aumento de solicitudes de asilo consideradas «injustificadas». Petro argumentó que la decisión es un acto de reciprocidad que busca preservar la dignidad y el trato equitativo entre ambas naciones.
La disposición del Reino Unido surge tras observar un incremento exponencial en las peticiones de asilo de colombianos: de seis solicitudes en 2021 a 900 solo en 2024. El embajador británico en Colombia, George Hodgson, afirmó que esta situación generó preocupaciones en su sistema migratorio, al señalar que muchas de estas solicitudes no cumplen los criterios necesarios. Desde el levantamiento del requisito de visa en octubre de 2022, el Reino Unido enfrentó mayores desafíos para controlar la migración irregular.
En respuesta, Petro anunció que los ciudadanos británicos que deseen visitar Colombia también deberán tramitar una visa antes de su ingreso. Aunque no se han precisado detalles sobre los costos o los tiempos de implementación, la medida subraya la postura del gobierno colombiano de mantener relaciones bilaterales en términos de igualdad. Según fuentes oficiales, la decisión no impactará otros acuerdos comerciales y políticos entre ambos países.
Si bien el acto de reciprocidad busca enviar un mensaje claro sobre las relaciones entre estados soberanos, la medida podría repercutir en sectores como el turismo y la inversión. En un contexto de alta dependencia económica y relaciones comerciales estratégicas, las decisiones migratorias deberían equilibrar las prioridades de seguridad con las oportunidades de cooperación. Para ambos países, un enfoque más coordinado y menos reactivo podría ser clave para mitigar tensiones futuras.