La Universidad de Antioquia (UdeA) marcará un precedente en el país al convertirse en la primera institución en producir el medicamento Dolutegravir Triconjugado, esencial para tratar el VIH. Este avance fue posible gracias a un convenio firmado con los ministerios de Ciencia, Tecnología e Innovación, y Salud y Protección Social, que busca garantizar el acceso a tratamientos de alta calidad y bajo costo para miles de pacientes en Colombia y Latinoamérica.
Por primera vez en la historia, el Gobierno colombiano utilizó la figura de “licencia obligatoria”, un mecanismo que limita la exclusividad de las grandes farmacéuticas, permitiendo que la Planta de Medicamentos Esenciales de la UdeA desarrolle este fármaco. Con esta medida, la universidad proyecta iniciar su producción industrial en un plazo de 12 meses, beneficiando a más de 150.000 pacientes en Colombia que actualmente enfrentan barreras económicas para acceder al tratamiento.
El impacto de esta decisión cobra relevancia en un contexto donde los contagios de VIH siguen en aumento. Según el Instituto Nacional de Salud, en lo que va del 2024 se han reportado 25.892 casos de contagios o muertes asociadas al virus, de los cuales Antioquia registra el 12,4%, consolidándose como la segunda región más afectada después de Bogotá. Además, el 94% de los casos en el departamento pertenecen a los estratos 1, 2 y 3, reflejando la urgencia de ofrecer alternativas accesibles para las comunidades más vulnerables.
El decano de la Facultad de Ciencias Farmacéuticas y Alimentarias de la UdeA, Wber Orlando Ríos Ortiz, destacó que este logro no solo reafirma los 30 años de experiencia de la planta en la fabricación de medicamentos esenciales, sino que representa un avance estratégico hacia la soberanía farmacéutica del país. “Será un medicamento de bajo costo que devolverá la esperanza a más del 50% de las personas que viven con VIH en Colombia”, aseguró.
En línea con esta misión, el Gobierno y la universidad proyectan la construcción de una nueva Planta Pública de Medicamentos en El Carmen de Viboral, consolidada como proyecto estratégico en el Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026. Esta iniciativa no solo ampliará la capacidad de producción, sino que también posicionará a Colombia como referente en la distribución de medicamentos esenciales en la región.
Este avance representa un punto de inflexión en el acceso a tratamientos de alto impacto, evidenciando cómo la sinergia entre la academia y el Estado puede ofrecer soluciones concretas a problemáticas de salud pública. Sin embargo, el éxito de esta estrategia dependerá de su sostenibilidad a largo plazo y de la implementación efectiva de políticas que promuevan una industria farmacéutica robusta, ética y al servicio de las mayorías.