A pesar de los esfuerzos del gobierno de Gustavo Petro para avanzar en la política de «Paz Total», la Segunda Marquetalia, liderada por Iván Márquez, ha reiterado que no firmará un acuerdo de paz. En un comunicado reciente, el grupo disidente reafirmó su negativa a llegar a un entendimiento con el Ejecutivo, mencionando que «un proceso de paz exprés» no resolvería los problemas históricos de Colombia.
El comisionado de paz, Otty Patiño, había anunciado el inicio del segundo ciclo de negociaciones con la Segunda Marquetalia, confirmando que La Habana, Cuba, será la sede del encuentro. Sin embargo, esta información ya se había hecho pública en el mes de junio, cuando se cerró la primera ronda en Caracas. A pesar del anuncio, aún no se ha fijado una fecha definitiva, y se espera que el diálogo continúe en octubre, dos meses después de lo inicialmente previsto.
El grupo guerrillero ha dejado en claro que la continuidad de las conversaciones depende de que el gobierno resuelva la situación legal de Iván Márquez, quien tiene una orden de captura con fines de extradición. Walter Mendoza, jefe negociador de la Segunda Marquetalia, reiteró que no avanzarán en las negociaciones hasta que se levante esta orden. Sin embargo, Patiño rechazó esta exigencia, lo que ha generado una nueva crisis en el proceso.
Mendoza también negó las acusaciones de narcotráfico, afirmando que su organización es una «guerrilla», aunque admitió que cobran impuestos en zonas cocaleras. Mientras tanto, otros grupos armados, como el ELN, también se distancian del gobierno, dificultando aún más la política de paz de Petro.