En respuesta a la invitación de Álvaro Uribe Vélez para que visitara las obras de infraestructura en Antioquia, el presidente Gustavo Petro afirmó que “las obras de Antioquia están prácticamente todas terminadas”. Petro justificó su negativa a realizar la visita al destacar que el verdadero problema que aqueja a la ciudadanía es la falta de educación y el hambre, que, según él, siguen siendo desafíos persistentes en el país.
La invitación de Uribe se produjo en un contexto de tensiones entre el gobierno nacional y la administración local en Antioquia. Uribe, expresidente y líder del Centro Democrático, había sugerido que Petro recorriera el Túnel del Toyo y otros proyectos relevantes en la región para ver el progreso y los desafíos que enfrenta el departamento.
Petro respondió en su cuenta de X, mencionando que la situación en Antioquia no requiere tanto de una visita presidencial, sino de un enfoque en problemas nacionales como la educación y la pobreza. El presidente también hizo hincapié en que su administración ha estado enfocada en abordar estos temas, a pesar de las críticas que ha recibido por el estado de las obras de infraestructura.
Por su parte, el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, había criticado la falta de inversión y compromiso del Gobierno Nacional en los proyectos de infraestructura 4G, señalando que el tramo que está a cargo del gobierno central está significativamente rezagado en comparación con el avance de las secciones gestionadas por el departamento y la ciudad de Medellín.

Rendón también destacó la necesidad de $650.000 millones adicionales para completar las obras, y solicitó al Gobierno Nacional que permita al departamento concluir el proyecto si no se puede proporcionar el financiamiento necesario.
En otro ámbito, el presidente Petro abordó la controversia en torno a sus recientes comentarios sobre periodistas, en los que fue criticado por llamar a algunas de ellas “muñecas de la mafia”. Petro defendió sus declaraciones, afirmando que su discurso ha sido malinterpretado y manipulador. Aseguró que se refería a periodistas que, a su juicio, no sirven a la ciudadanía sino a intereses oscuros, y puso ejemplos históricos para respaldar su punto de vista.
La respuesta de Petro y la continua controversia en torno a las obras en Antioquia subrayan las tensiones persistentes entre el gobierno nacional y las autoridades locales, así como las críticas en torno a la gestión de los problemas sociales y de infraestructura en Colombia.