El desplazamiento forzado sigue siendo una herida abierta en Colombia, con millones de personas obligadas a abandonar sus hogares debido a la violencia que ha marcado al país durante décadas. Según un reciente informe del Registro Único de Víctimas, la cifra de víctimas de desplazamiento forzado asciende a 8.649.955, un número alarmante que evidencia la magnitud de esta tragedia.
Esta cifra, con fecha de corte al 1 de mayo de 2024, refleja un aumento respecto al año anterior y sugiere que la realidad podría ser aún peor debido a posibles subregistros. El Defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis, ha alertado sobre el incremento de eventos de riesgo de desplazamiento en los primeros cinco meses de 2024, registrando 73 eventos en comparación con los 43 del mismo periodo en 2023. Además, se han documentado más de 35 eventos de desplazamiento masivo, afectando a cerca de 12.000 personas en todo el territorio nacional.
La violencia que impulsa estos desplazamientos proviene principalmente de enfrentamientos entre grupos ilegales, amenazas y el reclutamiento forzado. Estos actores armados han aprovechado incluso los periodos de cese al fuego para expandirse, generando graves afectaciones a la población, especialmente en el Pacífico colombiano. Más del 50% de las personas desplazadas viven en condiciones de pobreza, lo que agrava su vulnerabilidad y dificulta su reintegración.
El Defensor del Pueblo ha hecho un llamado urgente al Gobierno Nacional para trabajar conjuntamente con las entidades territoriales en la atención de esta crisis humanitaria. «No ha parado, se resiste, arrecia», afirmó Camargo Assis, subrayando que las estructuras armadas ilegales siguen causando desplazamientos y confinamientos masivos. Este fenómeno obliga a las víctimas a moverse dentro de sus municipios, a otros municipios del mismo departamento, o incluso a regiones más lejanas.
Las ciudades capitales son los principales destinos de los desplazados, recibiendo a personas de municipios cercanos y de otras regiones del país. El Registro Único de Víctimas ha identificado los departamentos con mayor incidencia de desplazamiento y las ciudades receptoras, poniendo en evidencia la necesidad de una respuesta integral y sostenida para enfrentar este flagelo que sigue desangrando a Colombia.