La alcaldía de Marinilla, en el oriente antioqueño, ha anunciado una serie de acciones para enfrentar la alarmante ola de envenenamientos de animales en la Vereda Cimarronas. La comunidad de esta zona rural ha reportado múltiples casos de perros y gatos muertos, situación que ha generado gran indignación y preocupación entre los habitantes.
En respuesta a estos sucesos, la administración municipal ha convocado una reunión con la comunidad y diversas autoridades locales, incluyendo la Secretaría de Gobierno, la Secretaría de Agricultura y la Fiscalía. Esta reunión tiene como objetivo principal establecer una ruta clara para la atención y recepción de denuncias relacionadas con estos casos de envenenamiento.
La subsecretaria de seguridad de Marinilla, Daniela Serna, declaró: «Desde la Secretaría de Gobierno, la Secretaría de Agricultura, la comunidad y los representantes de las juntas protectoras de animales nos acompañarán en la reunión que se va a realizar en la escuela de la vereda. Informaremos a la comunidad sobre las formas de recepcionar las denuncias contra este delito que se viene generando».

La comunidad ha alertado repetidamente a las autoridades sobre la aparición de animales envenenados, pero los casos siguen ocurriendo. La reunión programada busca no solo informar a los habitantes sobre los pasos a seguir para denunciar, sino también coordinar esfuerzos para esclarecer los hechos y detener a los responsables de estos actos.
La administración municipal extiende la invitación a todos los residentes de la Vereda Cimarronas y zonas aledañas para que asistan a la reunión y presenten sus denuncias. La colaboración de la comunidad es fundamental para resolver esta problemática y garantizar la seguridad de los animales en la región.
El compromiso de la alcaldía de Marinilla es claro: no permitir que estos actos de crueldad animal queden impunes y trabajar conjuntamente con la comunidad y las autoridades para proteger a los animales y restablecer la tranquilidad en la zona rural.