Un reciente caso de maltrato animal en Jamundí, Valle del Cauca, ha desatado indignación entre los ciudadanos y movimientos defensores de los animales. Un video, captado por vecinos del sector, muestra a una mujer golpeando repetidamente con un palo a una perrita atada en el balcón de su residencia. Las imágenes, que rápidamente se viralizaron en redes sociales, han provocado un clamor generalizado por justicia y medidas efectivas contra el maltrato animal.
A pesar de la evidencia clara del abuso, reportes indican que la intervención inicial de la policía no resultó en acciones correctivas significativas. Según las autoridades, la falta de heridas visibles o desnutrición en la perrita fue suficiente para no retirarla del hogar, a pesar de los evidentes signos de maltrato. Esta decisión ha exacerbado la frustración de la comunidad, que teme por el bienestar del animal y sus siete cachorros recién nacidos.
El caso ha captado la atención de figuras públicas y políticos locales, como el concejal Roberto Ortiz, quien ha expresado su disposición a adoptar a la perrita y ha pedido intervención urgente de las autoridades para asegurar la seguridad y bienestar de los animales afectados. Mientras tanto, la alcaldesa de Jamundí, Paola Castillo, ha indicado que se tomarán nuevas medidas para reevaluar la situación y proteger a la perrita y sus cachorros.
Este incidente subraya la necesidad de fortalecer las leyes y mecanismos de protección animal en Colombia, asegurando que los actos de crueldad no queden impunes y que los derechos de los animales sean respetados y protegidos de manera efectiva.