Medellín se encuentra en alerta debido a un brote de hepatitis A, con 170 casos reportados desde el inicio del año hasta la fecha. Esta enfermedad, que afecta principalmente al hígado causando inflamación, se transmite por contaminación del agua o de los alimentos, así como por vías oral, sanguínea o sexual. Aunque algunos individuos infectados pueden no desarrollar síntomas, otros experimentan fiebre, pérdida del apetito, fatiga, náuseas, vómito, dolor abdominal y cambios en la materia fecal, entre otros signos de alerta.
Ante esta situación, la Alcaldía de Medellín ha intensificado las medidas de prevención para contener la propagación del virus. Entre las recomendaciones emitidas a la población se incluyen prácticas de higiene básicas como el lavado de manos antes de preparar y consumir alimentos, el consumo de agua potable y la desinfección adecuada de los servicios sanitarios. Además, se hace un llamado especial a la vacunación contra el virus, una medida preventiva clave para proteger a la comunidad.
Rita Almanza Payares, líder de Epidemiología de la Secretaría de Salud, ha hecho un llamado a la acción, destacando que la vacuna contra la hepatitis A está disponible de forma gratuita para todos los niños a partir de un año de edad y para aquellos que actualmente tienen 12 años o menos. Los interesados pueden acudir a los puntos de vacunación distribuidos por la ciudad para solicitarla.
Aunque la hepatitis A generalmente no conduce a una enfermedad crónica del hígado y rara vez resulta fatal, puede provocar síntomas debilitantes y complicaciones en algunos casos. El diagnóstico de esta enfermedad se realiza a través de un examen de sangre, permitiendo así un tratamiento oportuno y adecuado para los afectados.
La respuesta de las autoridades sanitarias de Medellín ante este brote subraya la importancia de la prevención y el control de enfermedades transmisibles. A través de la educación sobre prácticas de higiene, el acceso a servicios de salud de calidad y la promoción de la vacunación, la ciudad busca proteger la salud de sus habitantes y prevenir futuros brotes de hepatitis A u otras enfermedades infecciosas.