En un caso que ha dejado perpleja a la comunidad de Medellín, Dávinson Flórez Laverde, conocido por ser el terror de las Tiendas D1, fue finalmente capturado luego de cometer al menos 40 robos en distintos puntos de la cadena de supermercados. Lo sorprendente del caso es que el sujeto, a pesar de haber sido capturado previamente en febrero de 2024 y tener casa por cárcel, continuó con sus actividades delictivas sin ninguna restricción efectiva.
Según las investigaciones de la Fiscalía, Flórez, quien acumuló un botín total de 45 millones de pesos, actuaba con precisión y audacia. Entre junio de 2023 y septiembre de 2024, ingresó a las tiendas como cualquier cliente, paseaba por los pasillos y se formaba en la fila para pagar. Sin embargo, cuando llegaba su turno en la caja, desenfundaba un arma de fuego y se llevaba todo el dinero de las registradoras, en promedio 1,12 millones de pesos por cada atraco. La mayoría de los robos ocurrieron en distintos barrios de Medellín, con especial frecuencia en Robledo, donde había sido aprehendido en su primer intento fallido por la justicia.
A pesar de la medida de aseguramiento domiciliaria impuesta en febrero de 2024, Flórez Laverde no detuvo su serie de delitos, demostrando la poca efectividad de la restricción judicial en su caso. Finalmente, fue capturado nuevamente por el CTI en Bello, un municipio vecino de Medellín. Sin embargo, ante la justicia, el delincuente se declaró inocente y no aceptó los cargos de hurto calificado y agravado que se le imputan.
Tiendas D1, que atiende a más de 1,6 millones de personas al día y generó ingresos operativos por 17,42 billones de pesos en 2023, ve finalmente un respiro tras la detención de este asaltante serial. Las autoridades esperan que este nuevo arresto ponga fin a una ola de robos que venía afectando a la cadena desde hacía más de un año y que, para muchos, puso en duda la efectividad de las medidas judiciales en el control del crimen organizado en la región.