Luego de varios días de tensión y bloqueos en las principales vías del país, el Gobierno Nacional y los transportadores de carga llegaron a un acuerdo que promete cambios estructurales en el sector. El paro camionero, que paralizó el comercio y el transporte durante más de cuatro días, fue levantado tras pactar un incremento gradual de $800 en el precio del ACPM, divididos en dos fases: un aumento inicial de $400 a partir del 6 de septiembre y otros $400 el 1° de diciembre de 2024.
El acuerdo no solo aborda el tema del combustible, sino que también suspende cualquier alza adicional hasta que se logren transformaciones estructurales en el sector. Entre los 14 puntos negociados, destaca la revisión del sistema de costos de fletes bajo el SICE-TAC, lo que permitiría una mayor estabilidad para los transportadores. Además, se establecieron mesas técnicas para ajustar las normativas del sector, lo que podría mejorar las condiciones laborales de miles de conductores en el país.
Este pacto también incluye una propuesta por parte del Ministerio del Trabajo de crear un artículo especial en la reforma laboral, que recoja las necesidades de los transportadores de carga. Con esto, el gremio espera garantizar mejoras salariales y una mayor regulación en los pagos, lo que representa un avance significativo para un sector históricamente olvidado.
El presidente Gustavo Petro celebró el acuerdo como un triunfo de la democracia y la paciencia ciudadana. La intervención de la Fuerza Pública fue aplaudida por su prudencia, mientras que el desmonte de los bloqueos se realiza de manera paulatina, permitiendo que la normalidad retorne a las vías del país.