El Estado Mayor Central de las FARC, liderado por alias Iván Mordisco, manifestó su interés en retomar los diálogos de paz con el Gobierno de Gustavo Petro. A través de una carta enviada al presidente, el cabecilla expresó su disposición a reactivar las conversaciones, congeladas desde marzo pasado, cuando se acusó al grupo de graves violaciones al Derecho Internacional Humanitario, como el asesinato de una lideresa indígena en el suroccidente del país.
Camilo González Posso, jefe negociador del Gobierno, señaló que el camino hacia una posible reanudación de los diálogos depende de una condición fundamental: la declaración de un cese al fuego unilateral por parte de las disidencias de Iván Mordisco. Según González Posso, este gesto sería un punto de partida que abriría la posibilidad de exploraciones más formales.
“El mensaje a Lozada (alias Iván Mordisco) es claro: si realmente desean retomar el proceso de paz, deben dar muestras de buena voluntad y compromiso con el respeto al Derecho Internacional Humanitario, empezando por el cese al fuego unilateral,” afirmó el negociador.
Las disidencias se encuentran actualmente divididas en dos bloques. Por un lado, los frentes liderados por alias Iván Mordisco, activos principalmente en Cauca, Valle y Nariño, permanecen en confrontación abierta con el Estado. Por el otro, los frentes bajo el mando de alias Calarcá mantienen conversaciones con el Gobierno en una mesa de negociación que cubre regiones como el Putumayo, el Catatumbo, Caquetá, Magdalena Medio y Norte de Antioquia.

El Gobierno ha advertido que cualquier reactivación de los diálogos con Iván Mordisco debe considerar los compromisos previamente adquiridos en los acuerdos firmados antes de la ruptura del proceso. Sin embargo, el camino hacia una negociación integral enfrenta desafíos, especialmente en medio de los ataques constantes y el recrudecimiento de la violencia en algunas regiones del país.
Mientras tanto, las negociaciones con la facción de alias Calarcá continúan, enfocadas en avanzar hacia un acuerdo que desmovilice a estos frentes y garantice mayores condiciones de seguridad en los territorios que ocupan. La decisión final sobre la propuesta de Iván Mordisco dependerá de su voluntad de implementar gestos concretos que respalden su intención de reincorporarse al esquema de paz total.