En medio de un clima de creciente tensión política, el presidente del Senado, Efraín Cepeda, ha respondido contundentemente a las graves acusaciones lanzadas por el presidente Gustavo Petro. En un discurso reciente, Petro afirmó que se está fraguando un golpe de Estado en su contra, supuestamente financiado con grandes sumas de dinero, con el objetivo de reemplazarlo con Cepeda hasta 2026. Estas declaraciones generaron una ola de reacciones y llevaron a Cepeda a defender la integridad del Congreso y su compromiso con la democracia.
Cepeda, en una declaración pública en sus redes sociales, rechazó enfáticamente las acusaciones de Petro, que sugieren que el presidente del Senado estaría interesado en su destitución. “Presidente, cómo se ve que usted no conoce el talante democrático del Congreso de la República. Acá no jugamos con la democracia”, afirmó Cepeda. El senador destacó que su único interés es que Petro complete su mandato hasta el 7 de agosto de 2026, fecha en la que se cumplirían los cuatro años para los cuales fue elegido.
En respuesta a los rumores sobre un golpe de Estado, Cepeda instó a Petro a concentrarse en los resultados que los colombianos esperan de su gobierno, en lugar de buscar enemigos imaginarios. “El Congreso de la República, como poder independiente y autónomo que es, seguirá cumpliendo con su misión constitucional sin distraerse de su rumbo”, subrayó Cepeda. Estas palabras se producen en un momento de fuerte confrontación entre el Ejecutivo y el Legislativo, especialmente en relación con la reciente discusión sobre la reforma tributaria y el presupuesto general de la nación.
El enfrentamiento entre Petro y Cepeda se ha intensificado en los últimos días, en medio de la discusión sobre un presupuesto de $523 billones y la ley de financiamiento. Cepeda había advertido que, si el gobierno no ajustaba sus propuestas, el Congreso podría rechazar la reforma tributaria. Esta postura ha sido citada como una de las razones detrás de las acusaciones del presidente Petro, quien ha señalado que el rechazo a su agenda legislativa es parte de un plan más amplio para debilitar su administración.
Cepeda también criticó la manera en que Petro ha tratado el tema, acusando al presidente de promover teorías conspirativas en lugar de enfrentar los desafíos reales de su gobierno. La polémica ha puesto de relieve la creciente polarización política en Colombia y la tensión entre las distintas ramas del poder, mientras el país enfrenta importantes desafíos económicos y sociales.