Las redes sociales estallaron este fin de semana tras las controversiales declaraciones del presidente Gustavo Petro, quien durante su participación en la asamblea nacional de la Colombia Humana en Bogotá calificó a quienes le piden que se retire de la presidencia como “asesinos” y “ricos” incapaces de aceptar a alguien de “piel café de leche” en el poder. Sus palabras generaron una ola de reacciones tanto a favor como en contra, intensificando el debate sobre su gestión.
En su intervención, Petro afirmó que aquellos que gritan “fuera Petro” están reproduciendo el mismo discurso que, según él, llevó al asesinato de 5.000 militantes de la Unión Patriótica en el pasado. “No se lo aguantan porque no soy de sus familias, no quiero pertenecer a sus clubes ni comprar sus acciones. Me ven como alguien que les exige tratar de igual a igual, algo que les resulta insoportable”, dijo el mandatario, provocando indignación entre diversos sectores de la opinión pública.
La respuesta en redes sociales no se hizo esperar. Muchos usuarios expresaron su rechazo a lo que consideran una estigmatización injusta por parte del presidente, destacando que no solo los “ricos” están descontentos con su gestión, sino también ciudadanos de diversas clases sociales que han visto con preocupación los resultados de su gobierno en sus primeros dos años. Uno de los críticos más destacados fue Daniel Samper Ospina, quien ironizó sobre la idea de que todos los que piden la salida de Petro son ahora ricos gracias a su gobierno.
Ángela Benedetti, hermana del exembajador Armando Benedetti y quien ha sido una figura cercana al petrismo, también se sumó a las críticas, declarando en la red social X que “jamás se me ha cruzado por la mente empuñar un arma” y utilizando el hashtag #FueraPetro. Su comentario resuena particularmente fuerte, dado su conocimiento de los entresijos de la campaña presidencial de Petro y las denuncias que ha hecho en los últimos días sobre irregularidades dentro de su equipo.
El discurso de Petro no solo ha exacerbado las divisiones políticas en el país, sino que también ha puesto en tela de juicio su capacidad para unir a los colombianos en un momento de gran tensión social y económica. Con estas declaraciones, el presidente ha abierto un nuevo frente de batalla en su ya turbulenta relación con diversos sectores de la sociedad colombiana.
