La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, ha recibido un apoyo significativo en su camino hacia la candidatura presidencial demócrata para las próximas elecciones. El expresidente Barack Obama y su esposa, Michelle Obama, anunciaron públicamente su respaldo a Harris, calificándola como una «futura presidenta fantástica». Este respaldo se considera un impulso clave para Harris, ya que los Obama gozan de una alta popularidad y son figuras influyentes dentro del Partido Demócrata.
En un mensaje compartido en sus redes sociales, Barack Obama expresó su orgullo y apoyo a Harris, destacando su capacidad para liderar el país en un momento crítico. «Michelle y yo no podríamos estar más orgullosos de respaldarte y hacer todo lo posible para que superes esta elección y llegues al Despacho Oval», dijo Obama en una conversación telefónica con Harris, la cual fue compartida en un vídeo publicado en la cuenta de X (anteriormente Twitter) de Harris.
Michelle Obama también expresó su apoyo a Harris, elogiando su positividad, sentido del humor y su habilidad para llevar esperanza a los ciudadanos. «Barack y yo estamos muy emocionados al respaldarla como candidata demócrata», afirmó Michelle, añadiendo que están comprometidos a hacer todo lo posible para asegurar su victoria en noviembre.
Este respaldo llega en un momento clave para Harris, quien ha obtenido un fuerte apoyo dentro del Partido Demócrata tras la retirada de Joe Biden de la contienda presidencial. La influencia de los Obama en el partido es considerable, y su apoyo es visto como un sello de aprobación que podría movilizar a muchos votantes demócratas y consolidar el liderazgo de Harris en la carrera hacia la presidencia.
La candidatura de Kamala Harris, quien ya ha hecho historia como la primera mujer, primera persona negra y primera persona de ascendencia asiática en ocupar la vicepresidencia de Estados Unidos, representa una oportunidad histórica para el Partido Demócrata. Con el respaldo de figuras tan prominentes como los Obama, su campaña se fortalece en un panorama político cada vez más competitivo.
