En un desarrollo reciente y significativo dentro del marco de la investigación por corrupción en la Unidad para la Gestión del Riesgo (UNGRD), el exdirector de esta entidad, Olmedo López, ha implicado al Ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, en su matriz de colaboración con la Fiscalía. Este hecho se produce tras varios días de declaraciones extensas y detalladas por parte de López, quien busca un principio de oportunidad con el ente acusador.
Durante una jornada maratónica de interrogatorios que se prolongó por más de una semana, López reveló nombres de al menos 25 funcionarios de alto nivel, entre los que destacan el Ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, y el propio Bonilla. Estas revelaciones forman parte de un documento extenso de más de 300 folios de pruebas, que López ha prometido entregar a la Fiscalía como evidencia de la corrupción sistemática en la UNGRD.
El abogado defensor de López, José Luis Moreno, confirmó que su cliente presentará una segunda y posiblemente una tercera matriz de colaboración en los próximos días, asegurando que los detalles se manejarán en el ámbito de la Fiscalía para respetar los acuerdos establecidos. «Olmedo López quiere contar la verdad al país, aportar las pruebas y reparar el daño causado», afirmó Moreno, subrayando el compromiso de su cliente con el proceso judicial.
El exdirector de la UNGRD está buscando un principio de oportunidad parcial, lo que implica colaborar plenamente con la justicia a cambio de beneficios en su proceso judicial. Esta colaboración podría incluir la reducción de penas o la negociación de cargos, dependiendo de la naturaleza y la magnitud de la información proporcionada. «La justicia premial ha permitido desarticular estructuras criminales dedicadas a la corrupción», explicó Moreno, destacando la importancia de este mecanismo en la lucha contra la corrupción.
El Ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, junto con otros funcionarios de alto nivel mencionados en la matriz, ahora enfrenta un escrutinio intensificado. La Fiscalía tendrá que evaluar las pruebas aportadas por López y determinar la metodología de negociación basada en la veracidad y la relevancia de la información presentada.
Este escándalo no solo sacude al Gobierno del presidente Gustavo Petro, sino que también pone de relieve las profundas raíces de la corrupción en algunas de las entidades más críticas del país. La comunidad espera que este proceso judicial arroje luz sobre la corrupción sistémica y establezca precedentes firmes para prevenir futuros abusos.
Mientras tanto, la nación observa con expectación el desarrollo de estos acontecimientos, que podrían tener implicaciones significativas para la administración actual y para las futuras políticas de transparencia y lucha contra la corrupción en Colombia.
