Claudia López, excaldesa de Bogotá, ha anunciado su renuncia al Partido Alianza Verde, marcando así otra notable salida de una figura prominente del partido en medio de un contexto de crecientes escándalos y descontento interno. Esta decisión sigue a la reciente renuncia de Antanas Mockus, otro emblemático líder del partido, exacerbando la crisis interna dentro de la colectividad.
En su declaración, López expresó su decepción con la dirección que ha tomado el partido, señalando que ha sido «cooptado y controlado por una minoría petrista» que no alinea con los valores y principios que inicialmente la motivaron a unirse. Esta crítica resuena con la de Mockus, quien también citó preocupaciones sobre la corrupción y la desviación de los principios fundacionales del partido como razones para su salida.
López hizo hincapié en los recientes escándalos que han afectado al partido, particularmente los relacionados con la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), donde figuras como el presidente del Senado, Iván Name, y Sandra Ortiz, exconsejera para las Regiones, han sido acusadas de corrupción. Estos escándalos, según López, han revelado un nivel de sectarismo, corrupción y abuso de poder que ella ya no puede respaldar.
La exalcaldesa reafirmó su compromiso con los principios de manejo responsable de los recursos públicos y la transparencia, declarando que la situación actual del partido y sus implicaciones la hacen insostenible para continuar siendo parte de él. Con su renuncia, López apunta a continuar su labor en pro de Colombia desde otras plataformas, buscando fomentar movimientos colectivos y transparentes que promuevan la justicia, la seguridad y el bienestar en el país.
Esta serie de renuncias plantea importantes interrogantes sobre el futuro del Partido Alianza Verde y su posición en el espectro político colombiano, especialmente en un momento en que el país enfrenta varios desafíos políticos y sociales significativos. La salida de figuras tan centrales como Mockus y López podría precipitar una reevaluación más amplia de las alianzas políticas y las estrategias del partido de cara a futuros compromisos electorales y legislativos.
