En un llamado urgente al Gobierno Nacional, Guillermo Herrera, presidente de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), ha criticado duramente la gestión del Ministerio de Vivienda, señalando la alarmante caída de la actividad en el sector durante los primeros meses de 2024. Con una reducción del 17.7% en las ventas de viviendas comparado con el mismo periodo del año anterior, sumado a un descenso del 34% en lanzamientos y 26.7% en iniciaciones, el panorama para el sector de la construcción es desolador.
Herrera destacó que las cifras no solo reflejan el peor inicio de año en quince años, sino que también se teme un impacto severo en la generación de empleo. Actualmente, el sector emplea a 1.5 millones de personas, una cifra que podría retroceder a niveles de 2011 cuando empleaba a 1.1 millones. La falta de un plan de reactivación concreto por parte del Ministerio de Vivienda agrava la situación, especialmente con la baja ejecución presupuestal que apenas alcanza el 1% y los recortes en los subsidios del programa Mi Casa Ya.
Este recorte ha sido especialmente crítico para la financiación de Vivienda de Interés Social (VIS), donde se prevé un déficit de 20.000 subsidios para este año, poniendo fuera de alcance la posibilidad de vivienda propia para muchos hogares colombianos. Según Herrera, este déficit se suma a una mala planificación y ejecución de los recursos presupuestales destinados a subsidios, lo que disminuye drásticamente las oportunidades de revitalización del sector.
La crítica situación se ve exacerbada por un nuevo modelo de preasignación del programa Mi Casa Ya, que ha resultado ineficaz y no ha contribuido a la reactivación del sector. Este modelo se concentra únicamente en la vivienda de interés prioritario (VIP), y hasta la fecha, sólo se han preasignado unos 500 subsidios para entregas previstas para los años 2025 y 2026.
Frente a este sombrío escenario, Camacol hace un llamado al Gobierno Nacional para que defina y ejecute un plan de reactivación efectivo que pueda revertir la caída en las tasas de empleo y permita recuperar la dinámica del sector. Mientras tanto, algunos alcaldes y gobernadores han comenzado a intervenir, anunciando financiación para cerca de 10.000 unidades de vivienda nueva con subsidios complementarios, en un intento por revitalizar la economía local. Sin embargo, la recuperación plena del sector podría tomar varios años si no se implementan medidas adicionales de forma urgente.