El Ministerio de Justicia ha presentado una solicitud formal ante el Consejo de Estado para suspender provisionalmente los efectos del Decreto 380 de 2021, firmado durante la administración de Iván Duque, que permitía reanudar las aspersiones aéreas con glifosato. Esta acción se enmarca dentro de una nueva política nacional de drogas implementada por el gobierno de Gustavo Petro, vigente hasta el 2033, que excluye el uso de sustancias químicas como el glifosato en la erradicación de cultivos ilícitos.
La posición del Ministerio, expresada en un documento de siete páginas, argumenta que las disposiciones del decreto en cuestión permiten una actividad que podría causar daños significativos tanto a la salud de las personas como al medio ambiente, contraviniendo los objetivos de las políticas públicas actuales del gobierno. Se destaca que existen alternativas menos dañinas para la erradicación de cultivos ilícitos, alineadas con los principios de desarrollo sostenible y protección ambiental estipulados en la Constitución Política de 1991.
El documento cita estudios que sugieren un impacto negativo del glifosato en el medio ambiente y potenciales riesgos para la salud de los campesinos expuestos al químico, incluyendo un informe del Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC) que lo clasifica como probablemente carcinogénico. Este enfoque refleja un cambio significativo respecto a las políticas anteriores, enfocando en una estrategia de erradicación de cultivos ilícitos que no comprometa la salud pública ni la integridad del ecosistema.
La demanda, presentada por el congresista Carlos Adolfo Ardila Espinosa, busca la nulidad del Decreto 380, argumentando que las decisiones tomadas durante el gobierno de Duque no consideraron adecuadamente las recomendaciones médicas y científicas disponibles. Este movimiento legal representa un paso más del gobierno de Petro hacia la consolidación de su política de «paz total» y la redefinición de la lucha contra el narcotráfico en Colombia, poniendo el foco en la salud, el bienestar social y la sostenibilidad ambiental.