La División Mayor del Fútbol Colombiano (Dimayor) está ultimando los detalles para cerrar el calendario de competencias del 2024, con las finales de la Liga BetPlay y la Copa Colombia previstas para mediados de diciembre. La posibilidad de que Atlético Nacional alcance ambas finales ha generado ajustes en las fechas, en un mes donde la pasión futbolera coincidirá con las celebraciones navideñas.
El primer duelo por la Copa Colombia está confirmado para el jueves 12 de diciembre en el estadio Atanasio Girardot, donde Atlético Nacional enfrentará al América de Cali. Sin embargo, la programación de los partidos de vuelta depende de lo que ocurra con el equipo verde en la Liga BetPlay. Si Nacional no avanza a la final del torneo de liga, el segundo encuentro de la Copa Colombia se disputaría el miércoles 18 de diciembre. En cambio, si el club paisa clasifica, las fechas se reorganizarían para permitir un respiro entre compromisos.
En la Liga BetPlay, Nacional es segundo en su grupo con 10 puntos y depende no solo de una victoria ante Santa Fe, sino también del resultado entre Millonarios y Pasto. Un empate o derrota del equipo azul en Nariño abriría las puertas de la final para los verdolagas, quienes luchan por mantener vivas sus aspiraciones de cerrar el año con doble corona. Por su parte, Millonarios lidera con 11 puntos y tiene la ventaja de clasificar directamente si logra una victoria en su próximo encuentro.
De concretarse un paso a las finales en ambos torneos, Atlético Nacional se enfrentaría a un exigente calendario. Las fechas tentativas plantean que la final de ida de la Liga BetPlay podría jugarse el 15 de diciembre, alternando con la Copa Colombia, cuyo desenlace se extendería hasta el 22 de diciembre. Este panorama refleja los retos logísticos de la Dimayor y el desgaste que enfrentan los clubes en un calendario comprimido tras los atrasos ocasionados por el Mundial Femenino Sub-20.
El caso de Atlético Nacional evidencia la fortaleza de su proyecto deportivo y su capacidad para competir en múltiples frentes. No obstante, la sobrecarga de partidos podría pasar factura, afectando su rendimiento en momentos cruciales. Para la Dimayor, este tipo de situaciones resaltan la necesidad de una mejor planificación del calendario, evitando que los equipos lleguen al límite de su capacidad física. Diciembre será un mes definitorio no solo para el fútbol colombiano, sino también para la credibilidad de una organización constantemente cuestionada por su gestión.
