El Gobierno colombiano, a través de Coljuegos, solicitó a Meta, propietaria de Facebook e Instagram, y al Centro Cibernético de la Policía Nacional, el bloqueo de las cuentas de tres reconocidos influencers: Daneidy Barrera (‘Epa Colombia’), Yeferson Cossio y Carlos Mauricio Gómez (‘La Liendra’). Esta medida busca frenar la promoción de apuestas ilegales en redes sociales, actividad que según las autoridades representa una pérdida anual estimada de $70.000 millones para el sistema de salud pública.
Causa de la medida
Los influencers han utilizado sus plataformas, con un alcance combinado de más de 23 millones de seguidores, para publicitar juegos de suerte y azar sin autorización del Estado y promocionar casas de apuestas extranjeras que no pagan los derechos de explotación en Colombia. Coljuegos, entidad encargada de la regulación de esta actividad, considera que estas prácticas desfalcan recursos destinados a la financiación de la salud y constituyen un delito según el Código Penal colombiano.
Marco Emilio Hincapié, presidente de Coljuegos, destacó la importancia de la cooperación de multinacionales como Meta en esta lucha. Además de esta solicitud, la entidad ha iniciado 35 procesos administrativos sancionatorios contra influencers y empresas vinculadas a estas actividades, y ha emitido más de 7.600 solicitudes de bloqueo de páginas web por apuestas ilegales.
Impacto financiero y social
Las apuestas ilegales no solo representan un impacto directo en los ingresos estatales, sino que también promueven un entorno de informalidad que afecta la transparencia y la regulación de las actividades comerciales en el país. Según Hincapié, cada año se dejan de recaudar $70.000 millones, fondos que podrían ser utilizados para fortalecer el sistema de salud y mejorar la atención a los ciudadanos.
Acciones legales y futuras investigaciones
Coljuegos también informó que está investigando 79 perfiles adicionales asociados a la promoción de apuestas ilegales, algunos de los cuales aún no han sido identificados. Estas medidas se enmarcan en una estrategia más amplia para combatir las actividades no autorizadas en el sector de juegos de azar, incluidas rifas y promociones no registradas.
Esta decisión pone en el centro del debate la responsabilidad de los influencers frente al uso de sus plataformas y el alcance de su contenido. La promoción de actividades ilegales a través de redes sociales no solo vulnera la legislación colombiana, sino que también evidencia la necesidad de mayores controles digitales y regulaciones específicas para el ecosistema de influencers.
La medida también plantea un desafío para Meta, que deberá balancear su compromiso con las leyes locales frente a las dinámicas de libertad de expresión y operación de su plataforma. La colaboración efectiva entre gobiernos y empresas tecnológicas será crucial para frenar estas prácticas y garantizar que el entorno digital sea utilizado de manera responsable y legal.
