El gobierno colombiano, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, solicitó formalmente el beneplácito para que Daniel Mendoza, abogado, periodista y creador de la polémica serie Matarife, sea nombrado como nuevo embajador en Tailandia. Esta decisión ha generado un fuerte debate, considerando la trayectoria del comunicador y las controversias asociadas a su trabajo.
Matarife, una serie documental que recibió dos premios India Catalina, se convirtió en un fenómeno mediático al exponer presuntas relaciones del expresidente Álvaro Uribe con grupos paramilitares, lo que le valió tanto reconocimiento como fuertes críticas y amenazas. Este último factor llevó a Mendoza a exiliarse en Francia. Sin embargo, la producción también lo enfrentó a fallos judiciales, como una orden de rectificación por parte de la Corte Constitucional.
Recientemente, Mendoza incursionó en la política al integrar la lista cerrada del Pacto Histórico para el Concejo de Bogotá, aunque no logró obtener un escaño. Ahora, su posible llegada a Tailandia lo posicionaría como un representante diplomático de Colombia en un escenario internacional estratégico. Mendoza reemplazaría a Karen Bibiana Tobar Quintero, quien actualmente ejerce como encargada de negocios en ese país.
El proceso depende de la respuesta del gobierno tailandés al beneplácito solicitado por Colombia. Se espera que esta confirmación llegue en los próximos días, formalizando el nombramiento.
La designación de Daniel Mendoza como embajador no es una sorpresa dentro del esquema del gobierno Petro, que ha priorizado nombramientos alineados con su narrativa política. Sin embargo, es un movimiento que podría polarizar aún más la percepción internacional de Colombia. Si bien Tailandia no representa un epicentro diplomático de alta tensión, la decisión envía un mensaje claro sobre el peso político que la administración da a figuras cercanas a su proyecto, independientemente de las polémicas que los rodeen.