La vicepresidenta y ministra de Igualdad, Francia Márquez, está en el centro de una controversia tras no presentar el presupuesto de su ministerio a tiempo para un debate de control político. En respuesta a las críticas recibidas, Márquez declaró que el documento fue enviado en dos ocasiones, pero “rebotó” cada vez, y que ahora no es problema del Ministerio ni suyo. Esta declaración ha generado una fuerte reacción en el Congreso y en redes sociales.
Durante una sesión de la Comisión Primera de la Cámara, se discutió por qué el presupuesto del Ministerio de Igualdad no se presentó a tiempo. La vicepresidenta argumentó que el cuestionario fue enviado a las 9:22 a.m. al correo de la comisión, pero que no llegó debido a problemas técnicos, lo que generó descontento entre los congresistas. La falta de presentación del presupuesto provocó una serie de críticas, destacando la de la representante Catherine Juvinao, de la Alianza Verde, quien calificó la situación como “desidia e ineptitud”.
La declaración de Márquez no calmó los ánimos. El representante Jorge Eliécer Tamayo del Partido de la U y el representante Juan Sebastián Gómez cuestionaron la excusa de la vicepresidenta y sugirieron alternativas para asegurar la entrega del presupuesto, como radicar un oficio o enviarlo por mensajero.
La polémica trascendió al ámbito legislativo y se extendió a las redes sociales, donde los comentarios criticaron la explicación de la vicepresidenta. La discusión llevó a la Comisión Primera a reagendar el debate para permitir el estudio del presupuesto. En sus declaraciones finales, tanto Juvinao como Márquez trataron de calmar la situación. Juvinao subrayó su apoyo al Ministerio de Igualdad y su deseo de que funcione bien, mientras que Márquez reiteró su compromiso con el Congreso y defendió la labor de su ministerio.
Esta situación ha resaltado las tensiones entre el Ejecutivo y el Legislativo, así como la importancia de la transparencia y la puntualidad en la gestión pública.