A dos meses de las elecciones presidenciales en Venezuela, el canciller colombiano Luis Gilberto Murillo confirmó que Colombia no enviará una misión oficial para observar el proceso electoral del 28 de julio. Esta decisión se produce después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela revocara la invitación a la Unión Europea (UE) como veedora del proceso.
Murillo explicó que, aunque se tenían intenciones y conversaciones con la Misión de Observación Electoral (MOE) para estructurar una observación técnica adecuada, el tiempo disponible no permitió concretar estos planes. «Algunas personalidades colombianas van a estar en esa observación. Queremos guardar mucha prudencia, cero protagonismo y poder contribuir en lo que esté a nuestro alcance para el Gobierno, las autoridades y el pueblo venezolano», señaló el canciller.
El canciller enfatizó la importancia de mantener una buena relación entre Colombia y Venezuela, subrayando la hermandad y cercanía que existen entre ambos países. «Deseamos que este proceso electoral pueda salir bien en beneficio de los venezolanos y también para la región», concluyó Murillo.
Revocación de la invitación a la Unión Europea
La decisión del CNE de Venezuela de retirar la invitación a la Unión Europea ha generado controversia. Este movimiento se realizó a pesar de que la inclusión de la UE como observadora era parte de un acuerdo entre el gobierno venezolano y la oposición. Elvis Amoroso, presidente del CNE, justificó la revocación debido a la «actitud hostil e irrespetuosa» de la UE, que mantiene sanciones contra aproximadamente 50 funcionarios chavistas.
La Unión Europea ha instado a reconsiderar esta decisión, subrayando la importancia de su presencia para la legitimidad del proceso electoral. Expertos coinciden en que la ausencia de la UE podría deslegitimar el proceso, favoreciendo al presidente Nicolás Maduro. Según Giulio Cellini Ramos, director de LOG Consultancy, la falta de observadores de la UE podría beneficiar a Maduro en este escenario electoral.
Observadores internacionales invitados
Aunque la UE no participará, el Centro Carter, los BRICS y la Unión Africana han sido invitados a supervisar las elecciones en Venezuela. La presencia de estos observadores internacionales busca garantizar la transparencia y legitimidad del proceso electoral.
Contexto y reacciones
El anuncio de la no participación de Colombia se produce en un contexto de alta tensión política y social en Venezuela. La Plataforma Unitaria de la oposición ha denunciado obstáculos y bloqueos en la inscripción de candidatos, como en el caso de Corina Yoris, inicialmente propuesta como sustituta de María Corina Machado.
El presidente Nicolás Maduro ha enfrentado críticas tanto internas como externas por su manejo de las elecciones y las restricciones impuestas a observadores internacionales. La decisión de retirar la invitación a la UE y la confirmación de la participación de observadores como el Centro Carter reflejan la complejidad y las controversias en torno al próximo proceso electoral venezolano.
En resumen, la decisión de Colombia de no enviar una misión oficial de observación, junto con la revocación de la invitación a la UE, destaca las dificultades y desafíos que enfrenta el proceso electoral en Venezuela, y la necesidad de observación internacional para asegurar la transparencia y legitimidad de las elecciones.