El expresidente Álvaro Uribe respondió enérgicamente a los mensajes del presidente Gustavo Petro, publicados el 22 de mayo, en los que advertía que incitar a derrocar el gobierno es delito y compartía un artículo del Código Penal sobre la sedición. Petro también sugirió que Uribe debería aprender a hablar de paz.
Uribe, en un evento en la Universidad Eafit en Medellín, afirmó que no se dejará intimidar por las amenazas de cárcel y comparó a Petro con Hugo Chávez. «Nos amenazan con cárcel, pero no nos callarán. En el caso mío ya lo lograron, pero debemos buscar un país seguro y con equidad», dijo el exmandatario.
En su respuesta, Uribe señaló que la actual crisis de seguridad en Colombia, con el recrudecimiento del conflicto y el acorralamiento de las Fuerzas Armadas, es motivo de preocupación. «Colombia está perdiendo la lucha contra las bandas criminales y los grupos guerrilleros», afirmó, agregando que hay una orden del Gobierno para que las Fuerzas Armadas “se queden quietas”.
Uribe también criticó las comparaciones con el castrochavismo y advirtió sobre la creciente similitud con los métodos de Hugo Chávez. «Dejen de amenazar a la oposición como lo hizo Hugo Chávez. Necesitamos seguridad. Que no le impidan a las Fuerzas Armadas proteger a los colombianos, no les impidan que cumplan con la Constitución», instó Uribe.
El expresidente destacó que su postura sobre la seguridad no ha cambiado y expresó preocupación por la sensación de inseguridad que se vive en todo el país. En particular, mencionó que en el departamento del Caquetá el Ejército está debilitado mientras se fortalecen las guardias campesinas e indígenas. «Los comerciantes dicen que están en casi todo el país extorsionados. Llaman al Ejército y responden que no los dejan acudir», reiteró.
Uribe también criticó las amenazas de Petro de un nuevo estallido social si no se aprueban sus reformas en el Congreso. «Impulsar unas reformas con congresistas sobornados y amenazar al país con estallidos sociales no tiene sentido», afirmó, sugiriendo que esto podría coincidir con movimientos promovidos por el ELN.
Finalmente, Uribe cuestionó hacia dónde Petro quiere llevar al país, dada la creciente violencia y la debilitada fuerza pública. «No puede ser que de un lado el Gobierno esté promoviendo una lucha armada, y de otro lado las Fuerzas Armadas se tengan que abstener de proteger a los colombianos. La protección de los ciudadanos tiene que darse ante la violencia por parte de las instituciones, quiera o no el presidente de la República», concluyó Uribe.