Al inicio de 2024, los empresarios colombianos enfrentan retos significativos debido a la inflación y el fenómeno de El Niño, afectando diversos sectores económicos y alterando la dinámica empresarial del país. Según la Encuesta Mensual de Expectativas Económicas del Banco de la República, el Producto Interno Bruto (PIB) mostró un crecimiento marginal de solo 0.17% a 0.2% en el primer trimestre, un reflejo de las difíciles condiciones que prevalecen.
Un reporte del DANE sobre el Indicador de Seguimiento a la Economía (ISE) en febrero de 2024 mostró un crecimiento del 2.49% respecto al mismo mes del año anterior. Sin embargo, este número es engañoso, pues ajustado por el efecto del año bisiesto, el crecimiento real es de solo 1.3%. Este dato revela que, a pesar de algunas mejoras en sectores como la agricultura y la minería, la economía aún lucha por recuperarse de manera robusta.
Los indicadores de industria y comercio para el mismo mes también muestran signos preocupantes, con una caída en la producción industrial del 2.2% y una contracción en el empleo del 1.1%. Las ventas al detalle disminuyeron en 1.8%, confirmando una tendencia de desaceleración que ha estado en curso desde junio de 2023. Esto se suma a una caída anual del 7% en el sector comercial en febrero de 2024, lo que pone de manifiesto la continua contracción en actividades clave para la economía.
Los empresarios citan además problemas adicionales como la inseguridad y el deterioro de la cartera de clientes, que afectan directamente la generación de empleo y el recaudo tributario, particularmente en el IVA. Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, expresó preocupación por la falta de respuesta gubernamental ante estas circunstancias adversas que aún no han sido suficientes para reactivar el comercio significativamente.
El sector de los vehículos también ha visto una disminución, con las matrículas de carros nuevos cayendo un 13.6% en el primer trimestre respecto al año anterior. A pesar de esto, el mercado de vehículos híbridos y eléctricos sigue creciendo, representando ahora el 22.9% del mercado.
Por su parte, la Inversión Extranjera Directa (IED) ha alcanzado un récord en los últimos ocho años, llegando a $3.144 millones en el primer trimestre, mostrando un aumento del 9.5% respecto al mismo periodo del año anterior. Este incremento ha sido impulsado principalmente por inversiones en minería y petróleo.
En resumen, aunque hay sectores que muestran cierto crecimiento, la economía colombiana enfrenta una serie de desafíos complejos que requieren atención y estrategias efectivas para asegurar una recuperación sostenible y equitativa.
