En los últimos días, Medellín ha enfrentado una ola de calor inusual que ha sorprendido a sus habitantes. Con temperaturas superiores a los 32 grados centígrados y noches más cálidas de lo habitual, la ciudad, conocida por su clima templado de «eterna primavera», parece estar atravesando un cambio climático temporal que ha afectado el confort de los paisas.
De acuerdo con el Sistema de Alertas Tempranas del Valle de Aburrá (Siata), las temperaturas actuales no han roto récords históricos, pero se acercan a los niveles máximos registrados en los últimos ocho años para el mes de septiembre. Este mes, que usualmente es una transición hacia la temporada de lluvias, ha presentado una baja nubosidad que ha permitido una mayor radiación solar, intensificando la sensación térmica tanto de día como de noche.
Por otro lado, Lina Isabel Ceballos, coordinadora de Geociencia del Siata, explicó que durante las noches, las temperaturas han estado por encima de los 20 grados, un nivel elevado si se compara con los promedios históricos de 17 grados. Esta diferencia, sumada al calor diurno, ha generado una sensación constante de bochorno en la ciudad.
Este fenómeno ha generado una ola de comentarios en redes sociales, donde los usuarios expresan su descontento y buscan maneras de lidiar con el calor. Algunos sugieren la necesidad de implementar sistemas de aire acondicionado en establecimientos y viviendas, mientras que otros simplemente piden que el clima vuelva a la normalidad.
Aunque las lluvias esporádicas podrían aparecer pronto, por ahora los habitantes de Medellín seguirán lidiando con temperaturas elevadas y noches calurosas, un escenario que no es común en esta región del país.
